5 playas andaluzas que tienes que visitar
Del Atlántico al Mediterráneo, las playas de Andalucía son únicas.
En este artículo vamos a nombrar 5 playas andaluzas en las que te tienes que dar un chapuzón. Aunque probablemente ya lo hayas hecho ¡Vamos allá!
Playa de Bolonia, Tarifa. Cádiz.
Es una de las playas preferidas por miles de windsurfistas de todo el mundo debido sus fuertes vientos, lo que la convierten en un lugar perfecto para la práctica de este deporte. Está muy bien conservada, gracias a la escasa ocupación humana del área circundante. Posee aguas cristalinas y poco profundas, y una arena fina y blanca. Además, posee dos atractivos extras: la duna de Punta Paloma (monumento natural) y las ruinas de la antigua ciudad romana de Baelo Claudia.
Playa de Zahara de los Atunes, Barbate. Cádiz.
Con más de 6km de longitud, es otra de las grandes extensiones de playa poco masificada que podemos encontrar en Andalucía. Tiene una climatología similar a las playas de Tarifa: fuertes vientos de levante y mar agitada. Lo que también la convierte en un lugar perfecto para practicar deportes acuáticos. Es fácil divisar el continente africano desde su orilla y disfrutar de increíbles atardeceres.
Playa de los Muertos, Carboneras. Almería.
Es una de las playas más famosas del este andaluz. Cuenta la historia que llegaban a sus costas muchos cadáveres de náufragos, arrastrados por las fuertes corrientes marinas que convergen en este punto, de ahí su nombre. Se aconseja ir bien preparado (comida, bebida, sombrilla, etc) ya que no dispone de este tipo de servicios y su acceso es algo complicado. Tiene poco más de 1km de largo, arena blanca y aguas cristalinas, perfectas para bucear.
Playa de Monsúl, Nijar. Almería.
Se encuentra en el Parque Natural de cabo de Gata y fue el lugar elegido para el rodaje de Indiana Jones y
Playa de los Caños de Meca, Barbate. Cádiz.
Esta playa tiene un encanto especial gracias al carácter bohemio y desenfadado de sus gentes. Fue un enclave hippie en los años 70, de ahí su atmósfera libre y alternativa. En verano es una playa con mucha vida, al igual que el pueblo, aunque cuando acaba la época turística todo vuelve a calma.